Por Bernardo Pilatti ESPN
En una batalla que hasta puede decidir su permanencia o retiro definitivo del boxeo, Manny Pacquiao (55-5-2 con 38 KO), buscará recuperar el título welter de la OMB y demostrar la vigencia de su carrera. En el MGM Grand de Las Vegas, Nevada y en una pelea a 12 asaltos, enfrentará al invicto campeón Timothy Bradley (31-0 con 12 KO). El combate será la revancha del celebrado el 9 de junio de 2012 y que ganó el estadounidense por una controversial y criticada decisión mayoritaria.
Para vencer en esta batalla, Manny Pacquiao deberá tener en cuenta las siguientes claves.
LA FOTO FINAL
Manny tiene una revancha difícil y que amenaza ser una copia de la anterior. En esa pelea, que la mayoría le vio ganar, tal vez su error fue imaginar de antemano que lo hecho era suficiente. Esta vez no podrá confiarse y además de mostrarse más activo, tendrá que cerrar todos los asaltos en plena ofensiva. Si consigue ser el protagonista en la foto final de cada asalto, nadie le robará la victoria.
¡CONCENTRACION Y PILAS MANNY!
Parece una tontería recomendar a Pacquio sobre su concentración, pero por increíble que parezca ese puede ser un factor determinante en la victoria o la derrota. En los últimos tiempos de su carrera el poder mental ha menguado notoriamente. Las derrotas, su vida fuera del ring y el bombardeo mediático de Bradley y su equipo, acusándolo de "estar acabado" pueden afectar de tal manera su desempeño, que podrían causar una nueva derrota. ¡Que encienda las pilas o Bradley lo apagará!
VELOCIDAD Y EFECTIVIDAD
Bradley se moverá hacia los ángulos, tratara de sorprenderlo con entradas fugaces y no dudará en amarrar si se complica. Es su estilo. Ante ese escenario Manny deberá recurrir con mucho criterio a su mejor velocidad. Cortar las salidas laterales, lanzar golpes por afuera de la guardia y retroceder golpeando ante cualquier amenaza de amarre es una opción inevitable a sus aspiraciones de victoria.
¡ATENTO AL CONTRAGOLPE!
Aquél derechazo impresionante de Juan Manuel Márquez y su imagen inerte sobre la lona, son un aliciente inevitable para cualquier rival de Pacquiao. Bradley sueña con acabarlo de la misma manera. Lo ha dicho públicamente y hasta su entrenador asegura que su pupilo se ha fortalecido para salir a noquear. Tal vez Manny diga que el KO de Márquez pudo ser un casualidad. Pero que no se descuide o se puede comer un segundo plato con la misma receta.
FREDDIE ROACH
El consagrado entrenador de Manny Pacquiao, Freddie Roach, se juega mucho en este combate. Nada menos que la posibilidad de que su pupilo pierda y sea retirado para siempre del boxeo. Ganar, esta vez, no es una opción, es una obligación. De lo que haya planificado, de lo que haya conseguido con el acondicionamiento físico del filipino y de lo que haga para contrarrestar el plan del oponente, mucho dependerá la victoria del PacMan.
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