Por Carlos Narváez Rosario ESPN
La presión a la que Joseph Agbeko dijo sometería a Guillermo Rigondeaux, nunca llegó. Tampoco hubo el intento para que eso materializara.
El doble campeón cubano retuvo sus coronas de las 122 libras de la Asociación Mundial (AMB) y de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), al vencer al ghanés por una amplia decisión unánime en un combate que careció de acción y actitud combativa por parte del retador, lo que quizás podría colocarla como una de las peleas más decepcionantes de 2013.
Esta vez Rigondeaux, quien había sido calificado antes como un peleador poco entretenido- resultó ser víctima de un oponente que apenas boxeó.
El choque, que fue la estelar del cartel presentado por la empresa Top Rank en el Boardwalk Hall, de Atlantic City, se vio empañado por la postura presentada por Agbeko quien terminó lanzando sólo 349 golpes versus unos 859 de Rigondeaux quien en varias ocasiones trató de buscar una reacción de su rival, pero no tuvo éxito.
Agbeko fue incluso presionado por su entrenador Roger Mayweather para que presentara mayor oposición, pero sus súplicas entre asalto y asalto resultaron infructuosas.
Rigondeaux conectó unos 144 golpes, mientras que Agbeko apenas logró hacer llegar con efectividad unos 48.
Ninguno de ellos resultó de poder. El noveno asalto fue -dentro de su pésima actuación- en donde se vio mejor el africano, con nueve golpes lanzados.
"Yo trato de hacer lo mejor que puedo", dijo Rigondeaux quien mejoró su marca a 13-0 y 8 nocáuts. "En cada pelea voy mejorando. (Agbeko) Fue un peleador que no puso mucha resistencia", agregó el cubano.
Los tres jueces dieron los doce asaltos a Rigondeaux (120-108).
Agbeko, que dejó su marca en 29-5 y 22 nocáuts, no peleaba desde su victoria en marzo ante el colombiano Luis Meléndez.
Su promesa de que pondría a prueba la pegada de caribeño no la cumplió y tampoco tuvo intensiones de ello.
'El Chacal' venía de vencer el pasado mes de abril a Nonito Donaire en el Radio City Music Hall de Nueva York. En aquella ocasión, el cubano fue criticado por utilizar un estilo táctico-defensivo para superar al 'Filipino Flash'.
Rigondeaux ahora podría bien ir tras una revancha con Donaire o ir tras un duelo contra ruso Vasyl Lomachenko entre dos ex medallista de oro olímpico.
"Creo que Nonito ha quedado traumado por la paliza que le dí. Y a Lomachenko que me avise para también darle una paliza. Soy el número uno", aseguró.
FIN AL INVICTO DE TAPIA
El peso mediano James 'Mandingo Warrior' Kirkland puso fin a una inactividad de 20 meses con un dramático triunfo por nocaut técnico a los 38 segundos del sexto asalto sobre el prospecto Glen Tapia, durante la antesala del combate entre Guillermo Rigondeaux y Joseph Agbeko en Atlantic City.
Kirkland enmudeció a toda una fanaticada que veía por primera vez a Tapia peleando en casa, propinándole un gran castigo a partir del tercer asalto cuando las energías del local ya mermaban.
Tapia, que abrió el choque como un apagafuegos, conectando a sus anchas a Kirkland e incluso provocándole rápidamente una inflamación en el pómulo izquierdo, se vio muy mermado por el plan de combate a cuerpo a cuerpo implantado por su rival.
Kirkland llevó a Tapia a las cuerdas en múltiples ocasiones y lo lastimó, obligando al cierre del quinto la intervención del médico.
En el sexto, ya Tapia estaba desarmado y entrenador Alex Devia era el único que parecía tener esperanzas de un resultado distinto al que ya se avecinaba. El referí Steve Smoger detuvo el choque en el sexto cuando Tapia ya no respondía. Un gancho de Kirkland dejó literalmente a Tapia en los brazos de Smoger.
"Todo el mundo viene con un plan de ataque", dijo Kirkland quien mejoró a 32-1 y 28 nocáuts.
Kirkland impuso su veteranía sobre la juventud del alias 'Jersey Boy'. "Yo quería que se gastara un poco.
Me dio buenos golpes, pero yo vine y le regresé los golpes. Demostré que tengo corazón", añadió.
Tapia sufrió su primera derrota en su carrera. Ahora tiene foja de 20-1 y 12 nocauts.
Mientras, en el respaldo el peso mediano inglés Matthew Macklin superó por decisión unánime a diez asaltos a Lamar Russ para así mejorar su marca a 30-5 y 20 nocáuts.
Macklin tuvo que emplearse al máximo ante Russ, un rival de último minuto que demostró grandes cualidades sobre el cuadrilátero. Para Russ, que sufrió su primera derrota y dejó su marca en 14-1 y 7 nocáuts, también fue primera pelea a diez asaltos.
Los jueces vieron ganar a Macklin con votación de 96-94, 98-92 y 97-93.
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